La restauración de muebles no implica únicamente devolver al mueble sus prestaciones estéticas y funcionales originales. Eso tan solo es una parte de este maravilloso universo. También es, en muchísimos casos, aplicar las técnicas necesarias para transformar el mueble en algo completamente nuevo. Pura magia. Y para ellos tenemos a nuestra disposición una variedad enorme de métodos. Como el tapizado. Hace unos meses ya os hablamos de las mejores telas para tapizar un sofá. Y hoy queremos profundizar un poquito más en esta gran técnica.
¿Cómo? Hablándoos de la pintura para tela de tapicería. Es probable que muchos de vosotros, como nosotros en su día, nunca hayáis oído hablar de ella. ¿Pintar el tapizado de un sofá? ¿O de una silla? ¿Realmente es posible hacer algo así? La respuesta es sí y mil veces sí. Es más, emplear esta pintura es una de las mejores maneras de transformar nuestros muebles. Es sencilla, es rápida y es barata. Comparada con la inversión de tiempo, dinero y esfuerzo que conllevaría quitar el tapizado antiguo y poner uno nuevo, esta pintura solo cuenta con ventajas.
Pintura para tela de tapicería
La pintura para tela de tapicería en spray fue diseñada específicamente para las telas de tapicerías. Quizá os suene bastante redundante, pero muchas personas cometen un gravísimo error cuando utilizan esta pintura con otros objetivos. Por ejemplo, pintar una pared o pintar un mueble. Sin embargo, es todavía más problemático lo contrario: utilizar pinturas convencionales, desarrolladas para pintar paredes o muebles, para pintar tapizados. En estos casos, las telas suelen desteñirse y quedarse rígidas una vez se han secado. Una triste calamidad.
En su lugar, la pintura para tela cuenta con propiedades concretas que hacen que no destiña. Además, tampoco convierte las telas de tapizado en una piedra rasposa y agrietada. Todo lo contrario: las mantiene suavitas como el primer día. Al mismo tiempo, no todas las pinturas para telas son iguales. Muchas están fabricadas para tejidos muy concretos. En ese sentido, solo podemos recomendaros que acudáis a una tienda de pinturas profesional y que os dejéis asesorar por quienes trabajan ahí. Ellos sabrán mejor que nadie qué pintura necesitas.
Aplicar pintura para tela en spray
Vale, nos hemos cansado del color de nuestro sofá tapizado. O de nuestro sillón. O de nuestro cabecero. Pero no tenemos la motivación suficiente para volver a tapizarlo de nuevo. Tenemos dos opciones. La primera, tirarlo y comprar uno nuevo. Como amantes de la reutilización, el reciclaje y la restauración, nunca recomendamos esta opción. Ya nos conocéis de sobra. La segunda opción es adquirir una pintura para tela en spray que nos guste, darle una segunda oportunidad al mueble y pintarlo. La pregunta es: ¿cómo proceder sin errores?
Lo primero que tenemos que hacer, como siempre, es limpiar adecuadamente el mueble tapizado. El proceso es muy sencillo. Primero, pasamos un trapo seco por la superficie para eliminar los restos y el polvo más evidentes. Y, segundo, volvemos a pasar un trapo, esta vez mojado en una mezcla de agua tibia y jabón para ropa delicada, por su superficie. Habrá que frotar en caso de que haya manchas muy asentadas. Cuando hayamos acabado con esto, será el momento de elegir la cantidad de pintura para tela acrílica y los materiales que vamos a necesitar.
En cuanto a lo primero, nos quedaremos con unos 250 mililitros. En cuanto a lo segundo, y además de la propia pintura, necesitaremos agua y una brocha. Una vez lo tengamos, mezclamos la pintura y el agua tal y como dicen las instrucciones del bote. Será entonces momento de rociar con el spray de pintura la tapicería del mueble. Con la brocha, lo extendemos cuidadosamente. Una vez se haya secado, le daremos una segunda capa siguiendo ese mismo procedimiento. Y volià. Opcionalmente, podéis lijar finalmente para eliminar imperfecciones.